top of page

LA COSMETICA DEL SIGLO XXI APRENDE A REALIZAR LOS TRATAMIENTOS COSMETOLOGICOS EN BASE A PRINCIPIOS ACTIVOS

La cosmética del siglo XXI parece acercarse cada vez más a la fuente de la eterna juventud.
La nutrición e hidratación de la piel por medio de agregados de vitaminas, ha sido superado por principios activos relacionados más profundamente con las estructuras moleculares que actúan en la dermis. En estos principios se incorporan fundamentalmente compuestos de péptidos, los aminoácidos y antioxidantes.


Los péptidos, que de acuerdo a la cantidad de aminoácidos que lo componen reciben a su vez el nombre de polipéptidos y oligopéptidos, están presentes en los tejidos cumpliendo varias funciones, entre ellas la de mensajeros genéticos. Para decirlo de otro modo, es mediante la intervención de los péptidos como los genes que deben reparar las células dañadas comienzan a trabajar.


Los aminoácidos son, por su parte, las moléculas que integran a los péptidos y a las proteínas. De este modo, la cantidad y características de éstos es la que determinará el desenvolvimiento de estructuras proteicas como el colágeno y la elastina, que hacen a la tonicidad de la piel, y de la queratina, que asegura la protección de la epidermis.


Por último, se llama antioxidantes a las moléculas encargadas de evitar o detener el proceso de oxidación sufrido por otras moléculas. Puntualmente, la tarea de éstos consiste en combatir a los radicales libres.



Como se ve, gracias a los estudios en genética la cosmetología cuenta hoy con herramientas sumamente novedosas para regenerar las células de la piel y evitar el envejecimiento cutáneo. Incluso en metabolismos maduros, la opción de las cremas de alta tecnología puede ayudar a reconstruir procesos que por la edad dejan de ser eficientes.

bottom of page